Reforma cocina ¡un cambio radical! un antes y un después.
Hay muchas maneras de reformar una cocina y dependiendo de casos incluso sin obra. Hoy os mostramos un cambio radical en una cocina, sustituyendo todas las instalaciones de fontanería, electricidad, quitando suelo y azulejos antiguos, para sustituirlos por unos nuevos.
Antes de la reforma se valora en que estado se encuentra la estancia antes de comenzar con el proyecto. En este caso como veis en la fotos, el suelo se encontraba en mal estado, el mobiliario era anticuado y estaba deteriorado por el paso del tiempo, además no tener una distribución correcta para las necesidades de este cliente.
Realizamos el proyecto de reforma y se le propone un cambio radical, cambiando la fontanería de sitio, eliminado el tabique de entrada que no tenía ningún sentido, haciendo la estancia más grande y espaciosa. Sustituir la despensa por un armario corredera, más como y practico. Además de arreglar todos los desperfectos, que con los pasos de los años, había bajo el suelo y azulejos.
Transformación de la terraza de la cocina
Para la reforma de la terraza, se le propone poner un mejor aislamiento, además de alisar y cortar las “poyatas” de las ventanas, que no tenían ningún sentido, abriendo más espacio en una estancia muy pequeña. Se retira el suelo antiguo y lo ponemos igual a de la misma cocina.
En cuanto al diseño de la cocina, se le propone una encimera ubicada en “L”, para ganar más espacio en la parte de abajo con gabeteras, y muebles mucho más cómodos, quitando la mayoría de los muebles colgantes, que siempre son más difíciles de alcanzar.
Para la decoración, se elige un azulejo satinado liso blanco, con un motivo en la parte central de la pared imitando a una flor. El suelo gris pulido, muy luminoso y limpio. Mueble blanco mate Modelo Maella de BC3, con encimera AQUA Fraccatoli de Silestone. Un color vivo para dar ese toque de color que se andaba buscando. Todo esto lo completamos con una nueva iluminación, empotrada en el techo de escayola.
Al tirar el tabique divisorio de la segunda entrada de la vivienda, dejamos un espacio más abierto y luminoso. Se reforma el armario empotrado. Se pintan las puertas de entrada de la cocina para que vaya todo acorde.
Mesa y sillas en el centro de la cocina. Al ser una estancia cuadrada generosamente grande, se centra la mesa, para no entorpecer la zona de cocina, dejando paso y siendo el mejor sitio para poder usar para comer, desayunar, cenar…
Un cambio radical de cocina y terraza, una reforma integral para durar en el tiempo y modernizando la instalaciones.