Cuando pensamos en elegir una cocina negra, lo primero que se nos viene a la cabeza, es que hará que la estancia, se vea mucho más pequeña. Sin embargo, con una buena decoración y combinación de muebles, puede ser muy elegante y minimalista.
Motivos para elegir una cocina negra
Lo primero que debemos tener en cuenta, es que sin un buen planteamiento, nuestra cocina negra puede convertirse en todo lo contrario a lo que buscamos. Es cierto que es mucho más habitual encontrarnos ante cocinas blancas, que buscan dar luminosidad a la habitación.
Sin embargo, eso no significa que debamos renunciar a las cocinas de otros colores más oscuros. Durante los últimos años, las tendencias en cocinas apuestan por un aspecto lujoso con estos colores como protagonistas. El principal motivo, es la elegancia que estos transmiten. Cuanto más sobrias son las tonalidades que utilizamos, mayor protagonismo adoptan los complementos.
¿Cómo decorar una cocina negra?
Como hemos mencionado, el protagonismo en una cocina negra son los detalles. Una muy buen opción, es jugar al contraste con la elección de la encimera. Podemos optar por un elegante juego entre blanco y negro, u optar por una apuesta más arriesgada añadiendo colores que aporten un toque distinto.
Nuestra recomendación es, que optemos por los mates con el objetivo de evitar las antiestéticas huellas. Pese a que están siempre presentes, y más en un lugar como la cocina, son los colores oscuros los que más resaltan estas marcas. También podemos añadir tratamientos antihuellas que nos ayuden a mantener la limpieza.
Debemos tener en cuenta que este tipo de cocinas, tiene un alto impacto visual. Por eso, debemos elegir una linea minimalista. Además, debemos evitar colocar armarios demasiado altos. No sólo porque será difícil para nosotros acceder a ellos, sino porque darán una sensación de sobrecarga a la habitación.
Combinar el negro y el blanco
Como hemos mencionado anteriormente, una opción excepcional es combinar blanco mate y negro. Si tenemos pintadas las paredes de negro, podemos contar con el contraste de los muebles blancos. De esta manera, tendremos mayor luminosidad. Si no queremos cambiar el color de las paredes o nos parece una opción demasiado arriesgada, podemos dejarlo para las baldosas.
Una alternativa menos arriesgada, es combinar la encimera y electrodomésticos negros con muebles en tonalidades madera o doradas. Seguirá dotando a la habitación de una elegancia y sencillez muy originales sin ser una decoración pesada. Pero si estas opciones os parecen demasiado atrevidas, siempre podemos empezar con muebles negros dejando el resto en tonos neutros.
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